Wikipedia

Search results

Showing posts with label Banco de México. Show all posts
Showing posts with label Banco de México. Show all posts

Tuesday, August 30, 2016

Banco de México y moneda de plata

José Alberto Villasana Munguía
Image result for banco de mexico
El miércoles 18 de abril de 2007, Guillermo Ortiz invitó a comer en las instalaciones del Banco de México, a los diputados de la Comisión de Hacienda, con el fin de explicarles por qué, según su punto de vista, no conviene convertir la moneda de plata en dinero.
Durante los días siguientes, varios diputados expresaron a la prensa que las razones aducidas por el Gobernador no resisten un análisis crítico y académico serio. Ortiz les dijo que la moneda de plata sería inflacionaria, tendría un costo fiscal elevado, y su posible falsificación implicaría para el comercio elevados costos de transacción al tener que verificar la autenticidad de las monedas.
El primer argumento, que sería inflacionaria, es totalmente inverosímil. Todo mundo sabe que es al revés: si existe un instrumento para frenar la inflación es precisamente la moneda de plata. Primeramente porque el dinero de valor intrínseco invariablemente es retenido en forma de ahorro. Aún pudiendo pagar con las monedas de plata en el comercio, el público las conserva y se deshace primero del papel, por lo cual la onza de plata no impacta el IPC, su velocidad de circulación es cercana a cero.



Pero además veamos las cifras consecuencia de monetizar las onzas “Libertad” respecto a la masa monetaria. El impacto en la inflación, derivado del Proyecto, es prácticamente nulo. Concretamente, el incremento de dinero en circulación correspondiente a los 22 millones de onzas “Libertad” que ya están en poder del público sería del 0.3%. Y el incremento de dinero en circulación correspondiente a las nuevas monedas que anualmente se acuñan sería del 0.08%. En comparación, el incremento anual de dinero en circulación correspondiente a los billetes, monedas y saldos bancarios es enorme (13%), lo cual sí causa un gran daño a la población por la pérdida de poder adquisitivo del peso de papel.
El Proyecto es tan anti-inflacionario, que el Banco de México podría aprovechar las nuevas colocaciones de onzas de plata “Libertad” monetizadas para lograr el mismo efecto que la restricción monetaria, pero sin el efecto negativo de deprimir la economía productiva como sucede con los “cortos”, los cuales operan a base de encarecer los intereses.
Por último hay que decir que el hecho de que las onzas monetizadas se vayan a ahorrar, eso no quiere decir que estén ociosas, ya que una vez depositadas en los bancos pueden servir como colateral para el otorgamiento de créditos de bajo interés. Estos créditos serían inmediatos, por la garantía de la plata depositada, y serían más sanos que los créditos creados de la nada, al estar basados en ahorro previo.
El siguiente argumento también resulta falso, y es el del “costo fiscal”. En Banco no logra entender que el Proyecto de monetizar la onza de plata “Libertad” no implica ningún costo fiscal, ya que es el ahorrador el que pagará los costos de la plata, de la acuñación y del señoreaje al momento de adquirir la moneda. Además, el Banco de México no verá reducidas las utilidades que actualmente percibe por concepto de billetes y monedas regulares, ya que no se plantea sustituirlos en ninguna medida: la onza ingresará a la circulación de forma paralela y complementaria al peso fiduciario por lo que, al contrario, el Banco comenzará a obtener un ingreso que hoy no percibe, ya que las onzas se venden actualmente a precio de costo, sin ninguna utilidad de señoreaje para el Erario. Son los bancos privados los que se llevan la utilidad por la comisión en venta y el descuento en recompra. El Proyecto de monetizar la plata proporcionará una nueva fuente de ingresos para financiar más proyectos sociales.
Por último está el alegato de la falsificación y el problema del comercio para detectarla. La moneda de plata, al igual que cualquier bien, está sujeta a la posibilidad de ser falsificada. De la falsificación inexacta ni hablemos, ya que está sería fácilmente detectable. Y aunque la falsificación exacta pudiera brindar el atractivo de apropiarse ilegalmente del señoreaje, no deja de ser mayor el interés de obtener la ganancia fruto de la falsificación de los billetes.
La falsificación de monedas es un delito ya tipificado y de competencia de la PGR (Fiscalía Especializada en Delitos Financieros). En los boletines de la última década de esa Fiscalía no aparece la detención de bandas falsificadoras de monedas, sino siempre de billetes, por la mayor facilidad de imitarlos mediante imprentas ó fotocopiadoras. Para falsificar monedas se requiere de grandes talleres de fundición y de máquinas troqueladoras, lo cual hace fácil su detección por parte de la autoridad persecutoria.
Por último, la posibilidad de falsificación no se ve como razón suficiente para no llevar a cabo el Proyecto, sobre todo de cara al enorme beneficio que se ofrece a la población.
El Banco de México haría bien en dejar la decisión respecto al costo de transacción al libre mercado, antes que prejuzgar la decisión del mercado.
En un documento anónimo, de noviembre de 2004, el Banco de México afirmó textualmente que “la demanda de esta moneda sería enorme”.
Por lo tanto, el Banco queda en la posición de alegar que el mercado estaría equivocado. El mercado es el mercado. Dejémosle la decisión, respecto a la aceptabilidad o no aceptabilidad de los costos de transacción, al mercado.
Por otra parte, la continua creación de moneda circulante (inflación monetaria que en forma sostenida en 13 años de autonomía ha sido a una tasa de 17% anual) inevitablemente erosiona el poder adquisitivo del peso, y es un costo de transacción muy real, comprobado y no hipotético, para toda la Nación.
Además, la bancarización y la utilización de tarjetas de crédito o débito que tanto favorece el Banco de México implica un costo de transacción oculto (de 2.5% en promedio) por las comisiones, para millones de usuarios. Al usarse la onza de plata “Libertad” para pagar –que es lo que se quiere hacer posible– no habrá comisión bancaria qué pagar. ¿Por qué favorece el Banco de México al sistema bancario y no al público mexicano?
En todo caso, sabemos que la onza de plata principalmente será ahorrada y tendrá poco uso como medio de pago; no serán significativos los costos de transacción debido al escaso movimiento que tendrá esta moneda.
Dado que los argumentos de Ortiz no se sostienen –y él debe ser consciente de eso-, los diputados y la opinión pública nos preguntamos cuáles serán los motivos ocultos de tal oposición. ¿Porqué su resistencia a ofrecer una alternativa de ahorro a las clases desprotegidas? ¿Porqué obligar a todos a tener que usar solamente papel?

Banco de México y moneda de plata

José Alberto Villasana Munguía
Image result for banco de mexico
El miércoles 18 de abril de 2007, Guillermo Ortiz invitó a comer en las instalaciones del Banco de México, a los diputados de la Comisión de Hacienda, con el fin de explicarles por qué, según su punto de vista, no conviene convertir la moneda de plata en dinero.
Durante los días siguientes, varios diputados expresaron a la prensa que las razones aducidas por el Gobernador no resisten un análisis crítico y académico serio. Ortiz les dijo que la moneda de plata sería inflacionaria, tendría un costo fiscal elevado, y su posible falsificación implicaría para el comercio elevados costos de transacción al tener que verificar la autenticidad de las monedas.
El primer argumento, que sería inflacionaria, es totalmente inverosímil. Todo mundo sabe que es al revés: si existe un instrumento para frenar la inflación es precisamente la moneda de plata. Primeramente porque el dinero de valor intrínseco invariablemente es retenido en forma de ahorro. Aún pudiendo pagar con las monedas de plata en el comercio, el público las conserva y se deshace primero del papel, por lo cual la onza de plata no impacta el IPC, su velocidad de circulación es cercana a cero.


Thursday, August 11, 2016

Debilidad estructural

Isaac Katz considera que la debilidad estructural en la economía mexicana es la ausencia de un Estado de Derecho sólido.

Isaac Katz es investigador y catedrático del Instituto Autónomo de México.
El INEGI dio a conocer dos indicadores que apuntan hacia un estancamiento de la economía. Primero, una estimación oportuna del PIB en el segundo trimestre y segundo, los indicadores cíclicos para el mes de mayo.
Respecto de la estimación oportuna del PIB, la actividad económica durante el segundo trimestre decreció 0,3% respecto del primer trimestre y un crecimiento con relación al segundo trimestre del año pasado de únicamente 1,4%. Por sectores de actividad respecto del trimestre previo, el primario decreció 0,1%, el secundario cayó 1,7% y el terciario no cambió. Respecto del segundo trimestre del 2015, el primario creció 4,3%, el secundario disminuyó en 0,5%, mientras que el terciario creció en 2,4%.



Por lo que toca a los indicadores cíclicos, el coincidente a mayo se ubicó en 99,9 puntos (con una disminución respecto a abril de 0,02 puntos), mientras que el índice adelantado a junio se ubicó en 99,4 puntos (una caída de 0,03 puntos en relación a mayo).
Es claro que la economía no va bien y las expectativas de crecimiento para éste y el próximo año se han revisado a la baja. Se pueden adelantar explicaciones puntuales sobre el mediocre crecimiento que ha tenido recientemente la actividad económica, como es el bajo crecimiento de la economía estadounidense y su efecto sobre las exportaciones manufactureras, la disminución en el valor de la producción petrolera, así como el dispendio e ineficacia del gasto público. El problema, a mi parecer, es uno más profundo, uno que es realmente estructural y que se centra en la debilidad del estado de derecho prevaleciente en México. Un indicador de ello es que México, a pesar de tener una posición geográfica envidiable, con un tratado de libre comercio con la economía más grande del mundo, reciba flujos de inversión extranjera directa que apenas llegan a representar el 2% del PIB.
México es un país de leyes solo porque son muchas, no porque sean eficientes y menos aún porque se cumplan. Un íntegro estado de derecho tiene cuatro elementos centrales. Primero, en el marco legal tienen que estar eficientemente definidos los derechos de propiedad. Segundo, los agentes económicos privados deben tener la libertad de utilizar sus recursos mientras en el ejercicio de esa libertad no atenten en contra de los derechos de terceros. Tercero, todo intercambio tiene que ser libre y voluntario, lo cual requiere que todos los mercados operen en competencia. Cuarto, que el poder judicial sea independiente, imparcial, eficiente y expedito y que garantice el cumplimiento de los contratos y proteja los derechos privados de propiedad en contra de actos de terceros, incluidos los actos de gobierno que los vulneren.
Es claro que estamos muy lejos de ser un país en el que predomine el estado de derecho: las leyes, empezando por la constitución, no son eficientes; existe una continua violación de los derechos privados de propiedad; no todas las transacciones son enteramente voluntarias dada la existencia de prácticas monopólicas privadas y gubernamentales; y, finalmente, el poder judicial no está garantizando la inviolabilidad de la propiedad privada ni el cumplimiento de los contratos.
Elementos coyunturales podrán explicar puntualmente el desempeño de tal o cual sector de actividad en un periodo dado, pero no pueden explicar el que la economía mexicana lleve más de tres décadas creciendo a tasas más que mediocres, un crecimiento promedio anual de solo 2%. Debilidad del estado de derecho, corrupción e impunidad son los elementos que lo explican y mientras esto no cambie, difícilmente experimentaremos un mejor desempeño.

Debilidad estructural

Isaac Katz considera que la debilidad estructural en la economía mexicana es la ausencia de un Estado de Derecho sólido.

Isaac Katz es investigador y catedrático del Instituto Autónomo de México.
El INEGI dio a conocer dos indicadores que apuntan hacia un estancamiento de la economía. Primero, una estimación oportuna del PIB en el segundo trimestre y segundo, los indicadores cíclicos para el mes de mayo.
Respecto de la estimación oportuna del PIB, la actividad económica durante el segundo trimestre decreció 0,3% respecto del primer trimestre y un crecimiento con relación al segundo trimestre del año pasado de únicamente 1,4%. Por sectores de actividad respecto del trimestre previo, el primario decreció 0,1%, el secundario cayó 1,7% y el terciario no cambió. Respecto del segundo trimestre del 2015, el primario creció 4,3%, el secundario disminuyó en 0,5%, mientras que el terciario creció en 2,4%.


Thursday, July 7, 2016

Dólar fuerte, mundo débil

Macario Schettino

El fortalecimiento del dólar, producto del temor de los grandes capitales a los problemas financieros en China y el estancamiento en Europa, es equivalente a la debilidad de todas las cosas que se cotizan en la moneda estadounidense. Muchas divisas, incluyendo el peso, y muchos bienes primarios, incluyendo el petróleo.

Acá en México nos fijamos nada más en esas dos cosas, peso y petróleo, por justificadas razones. Desde fines de los setenta, esos dos indicadores explicaban el funcionamiento de nuestra economía. No lo hacen desde mediados de los noventa, pero eso parece que todavía no se aprende (es que uno aprende de los golpes, como en 76, 82, 86 y 94, y no de las buenas épocas).



Por eso llevamos dos años pensando que la depreciación del peso se trasladará rápidamente a inflación, aunque no ha ocurrido. Resulta que muchas de las cosas que importamos, y se cotizan en dólares, han bajado de precio al mismo ritmo, o más, del que se ha depreciado el peso, de forma que, al final, no modifican su precio en moneda nacional. No es que no tengan impacto, pero ha sido menor de lo tradicional. Ya empieza a notarse mucho en los precios al productor, y antes de que se traslade a los precios que usted enfrenta, el Banco de México ha empezado a actuar. Pero de eso le platico después.

Lo que es interesante ver primero es cómo el fortalecimiento del dólar ha originado una desaceleración en Estados Unidos. Si su moneda es más fuerte, pueden comprar más, pero pueden vender menos. Y dado el funcionamiento global de la economía, si uno vende menos, acaba comprando menos, aunque los precios sean menores. Nomás porque no hay con qué. Como ayer comentábamos, el momento de cambio es el segundo semestre de 2014. En octubre de ese mes, Estados Unidos alcanza su máximo en exportaciones, 200 mil millones de dólares. De ahí empieza la caída, y en los primeros meses de 2016 anda en 180 mil millones. Una caída de 10 por ciento en sus ventas, que se refleja en un ajuste similar en sus compras, que pasan de 241 mil a 220 mil millones de dólares mensuales.

La actividad industrial de Estados Unidos cae al mismo tiempo. Crecía cerca de 4.0 por ciento anual en octubre de 2014, ahora promedia menos 2.0 por ciento. Y nuestra industria se mueve parecido. La verdad, no nos ha ido tan mal: en el período mencionado, China ha dejado de exportar a Estados Unidos 10 mil millones de dólares mensuales y Canadá 20 mil millones, con lo que ya es el tercer exportador a ese país. Nosotros pasamos al segundo lugar, porque nuestras exportaciones casi se mantienen. Pasamos de 82 a 81 mil millones de dólares mensuales. En parte, porque nuestra moneda se ha ajustado más que las de los otros países y la ventaja en precio algo ha ayudado.

En parte, porque se trata de una industria integrada.

Hace unas semanas le comentaba que me preocupaba una posible recesión en Estados Unidos. No parece que eso vaya a ocurrir, porque aunque la industria está por los suelos, las demás variables relevantes (ventas, ingreso, empleo) aunque están creciendo menos, siguen en terreno positivo. En México los indicadores cíclicos parecen ya apuntar claramente a una recesión, pero cuando los ve uno con detalle, resulta que se trata del mismo fenómeno que vemos en Estados Unidos: caen importaciones, cae industria, y en nuestro caso, el peso se deprecia. Pero lo demás, aunque crece menos, sigue en terreno positivo, incluso muy positivo, como las ventas y el empleo.

Todo esto, para ponerle contexto al alza en tasa de interés del
Banco de México. Mañana.

Dólar fuerte, mundo débil

Macario Schettino

El fortalecimiento del dólar, producto del temor de los grandes capitales a los problemas financieros en China y el estancamiento en Europa, es equivalente a la debilidad de todas las cosas que se cotizan en la moneda estadounidense. Muchas divisas, incluyendo el peso, y muchos bienes primarios, incluyendo el petróleo.

Acá en México nos fijamos nada más en esas dos cosas, peso y petróleo, por justificadas razones. Desde fines de los setenta, esos dos indicadores explicaban el funcionamiento de nuestra economía. No lo hacen desde mediados de los noventa, pero eso parece que todavía no se aprende (es que uno aprende de los golpes, como en 76, 82, 86 y 94, y no de las buenas épocas).


Monday, June 27, 2016

La Fed no subiría su tasa de referencia este año, mientras que el Banco de México sí ante una caída del peso, estiman analistas.

'Brexit' le cambia el panorama a la Reserva Federal

Esteban Rojas
Fed
La incertidumbre era alta, pero ahora es mayor. La salida de Reino Unido de la Unión Europea cambió las apuestas de los inversionistas y analistas sobre el rumbo de política monetaria en la Reserva Federal de Estados Unidos, pues un nuevo movimiento en su tasa de referencia podría darse hasta el siguiente año.

Las inversiones depositadas en los futuros de fondos federales otorgan ahora una probabilidad nula de que el banco central suba su tasa en las juntas de julio y septiembre, mientras que para noviembre es de apenas 1.8 por ciento.

“Con este telón de fondo , los bancos centrales estarán en un estado de ánimo pesimista. (…) un alza de tasas de la Fed está fuera de la mesa a través de las elecciones de noviembre , y cuestionable para diciembre . Las tasas en el mercado ya se habían ajustado”, comentaron Hang Trun y Charles Collyns, director ejecutivo y economista en jefe del Instituto Internacional de Finanzas.
Para las reuniones de la Fed del 14 de diciembre y 2 de febrero, las probabilidades de un aumento en la tasa son de 16.6 y 18.1 por ciento.

El instituto central mantiene el costo del dinero en el rango de 0.25 a 0.50 desde el pasado diciembre. La señales de desaceleración en la economía norteamericana y los riesgos relacionados con China y, ahora el Brexit, han hecho que la Fed profundice en una política monetaria de retiro gradual en los estímulos monetarios.

La Fed ha tenido mucho cuidado en instrumentar una política de comunicación con el mercado que evite “sorpresas”, sin embargo, analistas cuestionan ahora la credibilidad del banco central sobre este proceso.

Janet Yellen, presidenta del organismo, declaró el viernes que la Fed está lista para proveer liquidez a otros bancos centrales a través de líneas de swaps, ante la intensa volatilidad registrada en los mercados financieros.

REACCIONA EL MERCADO

Las tasas de interés se desplomaron en Estados Unidos, situación que se extendió con particular fuerza a prácticamente a la mayor parte de las naciones desarrolladas.

El referencial bono norteamericano a 10 años se desplomó a 1.56 por ciento, con lo que alcanzó un nuevo mínimo en el año, en términos de cierre.

En el Reino Unido la tasa bajó a 1.08 por ciento, situación que implicó una caída de 28.9 puntos base, como respuesta de la cobertura buscada por los inversionistas, después del ‘sí’ al Brexit.

En otros países como Alemania, los mayores flujos de capitales llevaron nuevamente al rendimiento del bono a 10 años a territorio negativo al cerrar el pasado viernes en -0.05 por ciento.

En países como Suiza y Japón, también prevalecen tasas de interés negativas al cerrar en -0.56 y -0.19 por ciento.

En México, el bono M a 10 años cerró en 6.05 por ciento con un baja de 0.02 puntos. El diferencial entre este bono y su similar en Estados Unidos se ubicó el pasado viernes de 449 puntos base.

EL TURNO PARA EL BANCO DE MÉXICO

El último día de este mes, el Banco de México anunciará el resultado de su reunión de política monetaria.

Las apuesta del mercado apunta a que el Banco de México quizá pueda volverse a desligar de la Fed, al estimar un nuevo incremento de 25 puntos base en su tasa de referencia, según una encuesta levantada por Bloomberg entre 15 especialistas del mercado.

El último movimiento en el costo del dinero por parte de Banxico se dio el pasado 17 de febrero, cuando aumento en 50 puntos base a su tasa, fuera del calendario marcado para sus reuniones.

El retraso de un nuevo ajuste en la política monetaria de la Fed, una inflación baja y la pérdida de fuerza en la recuperación de la economía mexicana serían factores que deberían apuntar a que Banxico pudiera seguir en compás de espera. Sin embargo, el factor desequilibrante podrá ser las presiones alcistas sobre el dólar.

La Fed no subiría su tasa de referencia este año, mientras que el Banco de México sí ante una caída del peso, estiman analistas.

'Brexit' le cambia el panorama a la Reserva Federal

Esteban Rojas
Fed
La incertidumbre era alta, pero ahora es mayor. La salida de Reino Unido de la Unión Europea cambió las apuestas de los inversionistas y analistas sobre el rumbo de política monetaria en la Reserva Federal de Estados Unidos, pues un nuevo movimiento en su tasa de referencia podría darse hasta el siguiente año.

Las inversiones depositadas en los futuros de fondos federales otorgan ahora una probabilidad nula de que el banco central suba su tasa en las juntas de julio y septiembre, mientras que para noviembre es de apenas 1.8 por ciento.

“Con este telón de fondo , los bancos centrales estarán en un estado de ánimo pesimista. (…) un alza de tasas de la Fed está fuera de la mesa a través de las elecciones de noviembre , y cuestionable para diciembre . Las tasas en el mercado ya se habían ajustado”, comentaron Hang Trun y Charles Collyns, director ejecutivo y economista en jefe del Instituto Internacional de Finanzas.