El jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos estima que Rusia, China, Irán y Corea del Norte han estudiado cuidadosamente las acciones militares de Washington.
Síguenos en Facebook
Este miércoles, el general de infantería y jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, Mark Milley, declaró que su país "destruirá a cualquier enemigo que pretenda causar daño a EE.UU. o a sus aliados" y el diario británico 'The Sun' estima que esas palabras son "una amenaza poco disimulada hacia Rusia", como respuesta al envió de Moscú de sistemas antimisiles de alta tecnología a Siria.
Milley detalló que "os venceremos con una contundencia como nunca antes os habían vencido, en cualquier sitio y en cualquier lugar" y subrayó que, "a pesar de todos nuestros problemas, las Fuerzas Armadas de EE.UU. os detendrán".
Desde el punto de vista de este militar norteamericano, Rusia, China, Irán y Corea del Norte habrían estudiado cuidadosamente las acciones militares de Washington para actualizar sus ejércitos de manera precipitada con la esperanza de poder vencer a EE.UU. en el futuro.El propio Mark Milley aclaró que sus comentarios son una reacción a la política de Rusia respecto a Crimea, además de las disputas con EE.UU. y el cese de la cooperación entre ambos países respecto a Siria.
Finalmente, Milley también manifestó que EE.UU. "está siendo desafiado", por lo que explicó que, si la intención es detener una guerra, el Ejército y el resto de ese país "deben estar preparados".
EE.UU. amenaza a Rusia con ataques terroristas
Las amenazas del general estadounidense se han producido una semana después de la polémica que provocó el portavoz del Departamento de Estado norteamericano, John Kirby, quien indicó que Rusia podría sufrir atentados en su territorio si no termina la guerra civil en Siria.Kirby aseguró que "los grupos extremistas continuarán explotando los vacíos que hay en Siria para ampliar sus operaciones, que podrían incluir ataques contra los intereses rusos, tal vez incluso en ciudades de Rusia", que "seguirá enviando soldados a casa en bolsas y seguirá perdiendo recursos, quizás hasta aviones".
Su homóloga rusa, María Zajárova, censuró esas palabras y valoró que parecían "más una orden para que un perro ataque que el comentario de un diplomático".