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Friday, July 22, 2016

“AMLO y la CNTE ¿ensayo vestido?”


Metamorfosis

Fausto Alzati Araiza
El 26 de Abril de 1937 la villa vasca de Guernica fue objeto de un cruel bombardeo por parte de la aviación alemana, que produjo numerosas víctimas inocentes y cuantiosos daños materiales. El hecho se enmarca en el desarrollo de la Guerra Civil española, comenzada el 18 de Julio de 1936 y que enfrentaba al gobierno de la República, democráticamente elegido, con el ejército de Franco, sublevado contra el poder legítimo. Mientras los soviéticos de Stalin ayudaron a la República, Franco obtenía abundante ayuda humana y material de la Italia de Mussolini y de la Alemania de Hitler. La aviación de éste último tomó la iniciativa de bombardear Guernica por cuenta propia, sin pedir ningún permiso ni notificarlo a Franco. Los aviones alemanes de la Luftwaffe realizaron un bombardeo-alfombra contra la desprotegida villa. La razón del ataque no podía ser la existencia de armas ni cuarteles o tropas ni objetivos estratégicos ni que la villa fuese un nudo de comunicaciones. La vergonzosa razón fue probar los nuevos aviones y su armamento ante el avecinamiento de la Segunda Guerra Mundial. Estos hechos inspiraron la pintura más famosa de Pablo Picasso.



Este trágico ejemplo me lleva a preguntarme si los bloqueos de la CNTE son en realidad una estrategia de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) para ensayar la toma por asalto del poder presidencial en el 2018, si la voluntad mayoritaria expresada en las urnas le niega, una vez más, el triunfo. Quienes se dedican al teatro usan la expresión “ensayo vestido” para referirse al que precede a la inauguración pública de la obra, ya anunciada y publicitada y de cuyo aforo y posterior opinión del público dependerá el éxito o fracaso de la puesta en escena, tanto en lo artístico como, más relevante al caso, en lo financiero. Lo más inquietante es la posibilidad de que AMLO prepare su estrategia con fundamento en  información  y análisis avanzados de la situación económica y política global. Para ello, AMLO cuenta entre sus asesores más cercanos con el doctor
Héctor Vasconcelos Cruz, graduado en ciencia política en Harvard y en Cambridge. AMLO sabe, por sus propias luces, que no son pocas, o gracias a Vasconcelos, que el actual estancamiento de los ingresos reales durante un periodo más largo que ninguno, desde la Segunda Guerra Mundial, es un hecho político fundamental. La principal explicación del prolongado estancamiento de los ingresos reales radica en las crisis financieras y en la débil recuperación posterior. Estas experiencias han destruido la confianza popular en la competencia y en la probidad de las élites empresariales, administrativas y políticas.
“Para cada problema complejo, existe una respuesta clara, sencilla e incorrecta”. HL Mencken pudiera haber estado pensando en la política actual. El mundo occidental, indudablemente, enfrenta problemas complejos, en particular, el descontento de grandes cantidades de ciudadanos. De la misma manera, los aspirantes al poder — como Donald Trump en EU y Marine Le Pen en Francia — ofrecen soluciones claras, sencillas e incorrectas, en particular el nacionalismo, el nativismo y el proteccionismo. Nativismo y proteccionismo como los que preconiza en México AMLO. Lo lamentable es que todos ellos están gravemente equivocados. Brillantes y avezados en lo político, pero ignorantes y desinformados en lo económico. Esto tiene remedio: que AMLO se deje asesorar por economistas competentes.

“AMLO y la CNTE ¿ensayo vestido?”


Metamorfosis

Fausto Alzati Araiza
El 26 de Abril de 1937 la villa vasca de Guernica fue objeto de un cruel bombardeo por parte de la aviación alemana, que produjo numerosas víctimas inocentes y cuantiosos daños materiales. El hecho se enmarca en el desarrollo de la Guerra Civil española, comenzada el 18 de Julio de 1936 y que enfrentaba al gobierno de la República, democráticamente elegido, con el ejército de Franco, sublevado contra el poder legítimo. Mientras los soviéticos de Stalin ayudaron a la República, Franco obtenía abundante ayuda humana y material de la Italia de Mussolini y de la Alemania de Hitler. La aviación de éste último tomó la iniciativa de bombardear Guernica por cuenta propia, sin pedir ningún permiso ni notificarlo a Franco. Los aviones alemanes de la Luftwaffe realizaron un bombardeo-alfombra contra la desprotegida villa. La razón del ataque no podía ser la existencia de armas ni cuarteles o tropas ni objetivos estratégicos ni que la villa fuese un nudo de comunicaciones. La vergonzosa razón fue probar los nuevos aviones y su armamento ante el avecinamiento de la Segunda Guerra Mundial. Estos hechos inspiraron la pintura más famosa de Pablo Picasso.


Wednesday, July 20, 2016

¿Por qué se molestan? ¿Qué harían ustedes, de estar al frente del gobierno?

Ángel Verdugo 
 

¿Por qué se molestan? ¿Qué harían ustedes, de estar al frente del gobierno?

¿Con la CNTE y personajes que por decir lo menos, han hecho de la violación permanente y sistemática de la ley, la razón de su vivir?

De cuando en cuando —reconozco que no siempre lo hago—, leo los comentarios que algunos lectores escriben en el espacio dedicado para ello. Casi siempre, los insultos y recordatorios a mi señora madre —que no tiene culpa alguna de los exabruptos que escribo—, los hago a un lado para prestar atención a los de quienes aportan algo que, si bien puedo diferir de su punto de vista, en no pocas ocasiones me ayudan a aclarar alguna idea, o complementar mi conocimiento incompleto en éste o aquel tema. A todos ellos, gracias.



Esta vez rompí con mi costumbre de no hacer caso de insultos y majaderías diversas, y los leí con cuidado; no porque el insulto hubiera sido altamente ofensivo sino por algo diferente: La nula o poca comprensión exhibida de un tema que, si bien dejó secuelas importantes —El fascismo—, hoy por hoy todavía no es cabalmente entendido, menos usado correctamente por no pocos.
Dejo de lado el seudónimo del autor porque, lo que me interesa es comentar el fondo de lo que escribió, más que exhibir a alguien. De tener interés en la colaboración y los comentarios, aquí puede leer ambos: http://www.excelsior.com.mx/opinion/angel-verdugo/2016/07/15/1105090
La costumbre en México, muy arraigada entre los integrantes de ese numeroso ejército que conforman los políticamente correctos y los que aspiran a ser, cuando menos, soldados rasos en el mismo, a la primera idea que no logran comprender, acusan al autor de aquélla de ser un nazi-fascista o cuando menos, como fue en el caso que me ocupa, de tener ideas fascistoides.
¿En verdad, plantear los elementos de lo que debe ser una negociación que buscaría concretar el regreso a la normalidad, reconducir las protestas dentro de los límites de la ley y, sobre todo, hacer que los delincuentes sean llevados -sin distingo alguno-, ante una autoridad judicial para que sea ésta la que decida su situación, es poseer ideas fascistoides?
Hoy, por ejemplo, ante el cierre de las sucursales bancarias en un número importante de municipios michoacanos, ¿qué debe hacer la autoridad? ¿Sentarse a negociar? ¿Qué y con quién? ¿Con la CNTE y personajes que por decir lo menos, han hecho de la violación permanente y sistemática de la ley, la razón de su vivir?
¿Es concebible acaso, negociar la abrogación de la Reforma Educativa en una Mesa con el Ejecutivo, mientras que los que exigen ese absurdo mantienen bloqueos, saqueos de bienes privados y daños diversos a millones de habitantes de varios estados del país?
¿Señalar, clara y enfáticamente, que ante esa conducta —que sólo merece la aplicación estricta de la ley—, no hay negociación posible, salvo la claudicación del Estado ante la delincuencia, es poseer ideas fascistoides?
No nos confundamos, menos utilicemos el viejo cliché —hoy inútil ante una nueva realidad—; a querer y no, lo entendamos y aceptemos o no, la aplicación urgente de la ley que permita la restauración del orden legal —hoy perdido en Michoacán, Guerrero, Oaxaca y Chiapas—, es la única salida. Ésta,  tiene un alto precio político a pagar el cual, cada día que pase permitiendo desmanes y delitos mil, crecerá exponencialmente.
El que señale que éste o aquél posee ideas fascistoides porque exige la aplicación de la ley, y la no claudicación del Estado ante los delincuentes, debería ver cómo actúan los gobiernos democráticos en otras latitudes.
Ojalá el gobierno entienda que lo que hace hoy, no es negociar, sólo claudicar.

¿Por qué se molestan? ¿Qué harían ustedes, de estar al frente del gobierno?

Ángel Verdugo 
 

¿Por qué se molestan? ¿Qué harían ustedes, de estar al frente del gobierno?

¿Con la CNTE y personajes que por decir lo menos, han hecho de la violación permanente y sistemática de la ley, la razón de su vivir?

De cuando en cuando —reconozco que no siempre lo hago—, leo los comentarios que algunos lectores escriben en el espacio dedicado para ello. Casi siempre, los insultos y recordatorios a mi señora madre —que no tiene culpa alguna de los exabruptos que escribo—, los hago a un lado para prestar atención a los de quienes aportan algo que, si bien puedo diferir de su punto de vista, en no pocas ocasiones me ayudan a aclarar alguna idea, o complementar mi conocimiento incompleto en éste o aquel tema. A todos ellos, gracias.


Monday, July 18, 2016

Deudas morales, intelectuales y la CNTE

por  

La semana pasada el reconocido Tomas Pogge dio una serie de pláticas en el DF. En una de ellas, durante la apertura de un congreso de filosofía en la Ibero, el liberal cosmopolita nos recordó lo endeudados que estamos con la justicia global. Aunque de manera menos ferviente que en sus primeras formulaciones sobre las obligaciones de la ciudadanía cosmopolita con sus coterráneos, Pogge sigue argumentando que no podemos simplemente desentendernos de los menos favorecidos y debemos presionar a nuestros gobiernos para que hagan algo al respecto.


El catedrático de Yale marca la diferencia entre la responsabilidad que existe hacia la persona junto a mí y aquella que se encuentra separada por la distancia. A diferencia de su primer llamado a extender la concepción de justicia liberal a nivel global de la misma manera que a nivel local,  ahora no tenemos el mismo tipo de responsabilidad moral con todos. Aunque sigo teniendo una responsabilidad fuerte en el caso del niño pobre que está en mi sociedad, con el que vive en África sólo tengo una débil que puedo llevar a cabo pidiéndole de vez en cuando a mi político favorito que no promuevan leyes que dañen a países pobres.
Sin entrar en mayor detalle sobre las inconsistencias y problemas de la teoría, hacia el fin de su presentación, una lámina proyectada sobre el escenario dictaba las responsabilidades morales del ciudadano. En medida en la que “nuestros” gobiernos, dice Pogge, son culpables de la miseria en el mundo, nosotros como ciudadanos tenemos una deuda moral a nivel global. Para saldarla, por un lado tenemos que esparcir la cura que el filósofo propone: un ethos cosmopolita que asuma el compromiso para la realización de los derechos humanos de todo el mundo, y por el otro tenemos que participar activamente con la institución política (que curiosamente es la que genera todo el mal, pero bueno[1]) para votar y moldear funcionarios que hagan del mundo un mejor.
Al final le pregunté  a Pogge que pasaría con un libertario como yo, o como Hayek, que partiendo de las mismas preocupaciones éticas llegamos a conclusiones distintas –la diferencia principal siendo la definición del Estado como parte fundamental del problema – y que en el terreno especifico de las “obligaciones” que podemos tener significa precisamente no participar ni legitimar el aparato estatal. Después de evitar mi otra pregunta[2],  me respondió que yo era parte de la economía y dado que la economía le da fuerza a un país yo era parte del problema. En privado retome el asunto y lo presioné sobre mi caso: le dije que no sólo intentaba evadir las contribuciones fiscales a toda costa, sino que activamente luchaba por esparcir mi “ethos” libertario anti gobierno y pro libre mercado (como esquema que beneficia a los menos favorecidos). No esperaba su respuesta: “en ese caso, quizá hasta la sociedad te deba” me dijo.
Así que ya saben, si conocen algún agorista/minarquista/libertario/anarquista que se dedica constantemente a señalarles lo injusto que es el mundo y como de ser más podríamos hacer del mundo un mejor lugar para todos, al menos paguen con una sonrisa, que aparentemente están en deuda con él.
Casi terminaba de escribir ésta entrada cuando vi la propuesta de Leo Zuckermann  y Javier Aparicio sobre armar una caravana de ayuda para los niños que pierden clases por las movilizaciones de la CNTE. Quizá el símil no sea evidente, pero podemos abstraer los componentes principales de ambas posturas. Por un lado, Pogge habla de instituciones y su consecuencia en los derechos que las personas pueden ejercer y nuestra responsabilidad al respecto como individuos. Zuckermann y Aparicio nos hablan de que hay un problema en la institución educativa y llaman a la sociedad civil a organizarse para ofrecer un paliativo y mandar un mensaje.
Leo y Javier se mostraron convencidos por la idea propuesta por alguien en twitter y ahora se inicia la movilización en redes sociales para ver cuánto pegue tiene la propuesta de mandar a profesores y alumnos de escuelas superiores y centros de investigación en una cruzada político/educativa  de la sociedad civil “que está a favor de la reforma educativa y en contra de que los niños oaxaqueños estén perdiendo su ciclo escolar”.
cnte
Pero, preguntemos: para usted que (posiblemente) cree en el Estado y en su diseño racional, que además contribuye a su mantenimiento y al salario de sus funcionarios, ¿no encontraría extraño que el director de la División de Estudios Políticos del CIDE trabaje impartiendo clases en una primaria en Oaxaca? Surgen otras preguntas: ¿Lo mejor que puede hacer alguien con la influencia de Leo Zuckermann es encabezar una caravana de voluntarios a Oaxaca? ¿El lugar de nuestros universitarios es en el aula rural? ¿No pagábamos para que unos estudien, otros enseñen? ¿Por qué recibir apoyo del gobierno si respondemos a una carencia ocasionada por éste? ¿Estar en contra de lo que sucede con la CNTE significa forzosamente estar a favor de la reforma educativa? ¿No hay manera de que los recursos (humanos y materiales) de la sociedad mexicana se gestionen de manera eficiente y no tengamos que caer en estas soluciones harto ineficientes?  Parecería que más que ser claramente una buena idea es un terreno cuando menos pantanoso.
Aquí tenemos que abrir la puerta a la posibilidad de que ambos dijeron que irían sin pensar realmente ir. Consientes de sus costos de oportunidad -esto es lo que dejamos de hacer por hacer algo-, quizá solo intentan alebrestar solidarios para mandarlos a una aventura más mediática que educativa[3]. También existe la posibilidad de que sepan que en la práctica una idea peligrosa que sólo generará más problemas al confrontar a los bienaventurados de corazón con el resultado de años de prebendas estatistas que engendran huestes dispuestas a defender “sus ingresos” por cualquier medio.
Pero esto no sólo se trata de costos de oportunidad, lo insincero o lo problemático de la idea. Imaginen el enojo que crece día tras día porque nuestro departamento tiene humedad, goteras, ratas, fugas, problemas de inseguridad y de servicios. Lo que proponen Zuckermann y Aparicio es canalizar esa furia para ir en ayuda del departamento de abajo y sacar el agua sucia que lo está inundando en lugar de criticar la estructura del edificio y su administración y exigir un cambio de curso ¿En qué sentido podría esto ser algo positivo como sugiere Leo?
Positivo sería canalizar esa furia en comprender las razones de nuestro constante disgusto con lo que sucede a nuestro alrededor. Algo positivo sería que usando su influencia y conocimiento, Zuckermann y Aparicio le dijeran a la gente como la intervención del Estado suele generar estas cochinadas, y la competencia y las fuerzas de mercado ayudan a evitarlas. Allí donde los maestros que trabajan son los que pueden cobrar, y donde las escuelas que dan clases son las que la gente premia con su dinero. También dónde el que quiere ayudar al menos favorecido puede decidir mediante cual caridad ayudar, éstas también sujetas a la competencia y al manejo eficiente de recursos escasos.
No hago aquí sólo una petición de principio: aún suponiendo que la educación es un derecho, y que la sociedad civil puede y debe hacer algo al respecto, nuestros expertos y opinólogos son incapaces de salir con una mejor propuesta de reforma educativa profunda que reconozca y fomente las fuerzas de la competencia que llevan al desarrollo del sector educativo, mientras señale la ineficiencia y las perdidas que ocasiona el sistema actual. No, nuestros intelectuales de corte defienden la reforma educativa que propone el Estado y mandan a la sociedad civil a legitimarla políticamente arriesgando su integridad y quizá escalando el conflicto. ¿De qué se trata?
focus
Menos gobierno, y más sociedad civil, pero no sociedad civil para que haga el trabajo sucio del gobierno, sino para que lo critique y comience a tomar conciencia de que los problemas son estructurales. Nuestro edificio se cae a pedazos, y es culpa de los cimientos y la administración, si queremos ayudar a nuestros co-inquilinos (además menos favorecidos) lo que tenemos que hacer es luchar por la liberalización de la educación en México. ¿Bono educativo? ¿Socialización –de programas y costos- a nivel local de las escuelas? no lo sé, pero si sé que hay maneras diferentes de introducir los mecanismos, y por lo tanto fuerzas, de mercado al sector educativo, que la reforma educativa y centralista del gobernó se queda corta y que nuestra furia se puede canalizar de manera más constructiva mediante la crítica a la raíz del problema y no a través de paliativos superficiales o declaraciones políticas a favor de la reforma. Eso ayudaría a saldar nuestra deuda moral con los oaxaqueños.
@mentecerrada

[1] El planteamiento en la obra general de Pogge en los últimos años es interesante en la medida que parece intentar contestar las mismas preguntas que Frederich Hayek y otros libertarios. Las respuestas de Pogge fallan desde mi punto de vista por un problema de definición: para él, el Estado forma parte inherente de los sistemas competitivos/adversariales y la regulación que daña a los menos aventajados no es más que la conclusión sistemática de la competencia.
[2] Sobre la contradicción de sus tres postulados de lo que significaba proteger los Derechos Humanos: el primero en términos negativos de no interferencia y los dos siguientes en términos positivos de facilitar y posibilitar el ejercicio de derechos sociales. El Estado no genera recursos ex nhilo y por lo tanto para garantizar los positivos se requiere una violación de los negativos. A lo que respondió “no escuche bien” en público y “estoy totalmente en desacuerdo” en privado.
[3] Como lo reconoce el mismo Zuckermann al decir que esto en realidad se trata de mandar un mensaje..

Deudas morales, intelectuales y la CNTE

por  

La semana pasada el reconocido Tomas Pogge dio una serie de pláticas en el DF. En una de ellas, durante la apertura de un congreso de filosofía en la Ibero, el liberal cosmopolita nos recordó lo endeudados que estamos con la justicia global. Aunque de manera menos ferviente que en sus primeras formulaciones sobre las obligaciones de la ciudadanía cosmopolita con sus coterráneos, Pogge sigue argumentando que no podemos simplemente desentendernos de los menos favorecidos y debemos presionar a nuestros gobiernos para que hagan algo al respecto.

Thursday, July 7, 2016

Osorio se lava las manos

Raymundo Riva Palacio

La restauración del diálogo político entre el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y los 30 líderes nacionales de la Coordinadora magisterial, frotó bálsamo sobre el delicado tejido sociopolítico mexicano. Una decisión provocada por la magnitud de la protesta organizada el martes por los maestros disidentes, apresuró un tercer encuentro en Bucareli. Fue rápido, sin mayores preámbulos ni protocolos, donde los maestros respondieron a la pregunta que les había hecho Osorio Chong la semana pasada: ¿qué es lo que pretenden? La respuesta, aunque en tono suave, busca lo que hasta ahora es impensable en el gobierno: marcha atrás en la reforma educativa. Ceder, como le dijo hace unos días Jesús Zambrano, presidente de la Cámara de Diputados, al secretario de Educación, Aurelio Nuño, sería un error. Si se cede ahora, afirmó, se cede todo.

Todo es absolutamente todo, incluido, como primer paso, el secretario Nuño, cuyo trabajo en la arquitectura de la reforma educativa desde la campaña presidencial del candidato Enrique Peña Nieto, la redacción de la iniciativa y su negociación dentro del Pacto por México sería echado a la basura. Esto luce tan impensable, como revertir la reforma educativa. El gobierno se encuentra en un callejón sin salida, y el secretario de Gobernación, el héroe instantáneo de la paz, podrá llevarse las medallas de una victoria efímera en un horizonte turbulento. Ante la violencia en el sur del país ganó tiempo, pero el pulso de la rebeldía sigue agitándose.

La dirigencia del magisterio ha sido cuidadosa con Osorio Chong. A diferencia de Nuño, nadie pide al presidente que lo destituya. Los líderes magisteriales no hablan de sus avances intramuros, y los comunicados los pactan en la Secretaría de Gobernación. Como el documento que le entregaron el martes por la noche, donde aclaran, como antídoto contra las críticas, que no respaldan “la herencia ni la venta de plazas, instrumentos del clientelismo establecido por las direcciones charriles de la SNTE”. Lo que quieren es la suspensión “definitiva” de la reforma educativa. Ya no usaron la palabra derogar (que significa anular una norma o ley) y emplearon suspender (que es detener o diferir). La semántica es importante. La derogación es la anulación automática y no puede volver a discutirse; la suspensión, aún en forma definitiva, es llevarla a un espacio en donde cabe un nuevo proceso legislativo, sin necesidad de construir una nueva ley.

Osorio Chong jugó con ellos y propuso ser el facilitador “de un proceso de diálogo con la Secretaría de Educación Pública en torno al modelo educativo”. El secretario de Gobernación abrió la puerta a la disidencia magisterial y se lava las manos. Su encomienda era buscar el restablecimiento del orden en Oaxaca y, cuando menos hasta ahora, pese a los gritos y los bloqueos, la paz no está rota. Hay entidades con el fuego latente, pero con el espacio de una semana para darles la respuesta, ganó espacio de movimiento él, pero ni el presidente ni Nuño ni nadie en el gabinete, como el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, que está ideológicamente comprometido con la reforma educativa, lo tienen.

La disidencia magisterial tiene claro desde el principio lo que desea. Lo dejó por escrito en el documento que entregó a Osorio Chong en los considerandos V, IX y X: el Sistema Educativo Nacional no será instaurado mediante acciones punitivas contra los docentes y bajo una estructura legal que establece que la evaluación conduce a su despido o separación del aula. Es decir, más de seis meses de cruzada de Nuño por la evaluación de los docentes, miles de palabras empleadas en sus comunicados para hablar sobre los altos porcentajes de maestros evaluados, son inocuos. Ese sistema, dicen los líderes de la Coordinadora, es inaceptable. Igual es la tabla rasa impuesta en el nuevo modelo educativo.

Exigieron en el considerando VII una “educación verdaderamente autónoma, de tal manera que nuestras escuelas tengan libertad para, en el marco de una educación nacional, proponer y definir cómo deben ser los planes y programas, los contenidos y las prácticas pedagógicas dentro y fuera del aula”. Autonomía total para las escuelas significa autogobierno. La rectoría de la educación por parte del Estado, principio fundamental de la reforma educativa, entregada para el manejo bicéfalo en función de “cada zona, región y entidad federativa”, como apuntaron en el considerando IX. No quieren tampoco que se abra la educación de normalistas en las universidades privadas, sino que se mantenga la plaza automática de maestros para los egresados de las normales públicas.

La Coordinadora quiere que su modelo de educación sea debatido a nivel nacional y que, entretanto, la reforma educativa se coloque en el limbo. Regresar al statu quo previo al gobierno de Peña Nieto, es la exigencia. ¿Qué dijo el secretario? Facilitará las condiciones para que eso suceda. El martes por la noche Osorio Chong le dio un placebo a la Coordinadora, que salió de Bucareli como la vencedora de una larga batalla, pero colocó a Peña Nieto en una encrucijada. Su instrucción era buscar la paz en Oaxaca, no alentar la revisión de la reforma educativa. Entonces, ¿para quién trabaja el secretario de Gobernación? Si la respuesta sigue siendo para el presidente, se verá entonces que el lunes todo regresa al punto donde partió, pero con un clima de mayor irritación. Osorio Chong, de ser así, volvería a ensuciarse las manos.

Osorio se lava las manos

Raymundo Riva Palacio

La restauración del diálogo político entre el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y los 30 líderes nacionales de la Coordinadora magisterial, frotó bálsamo sobre el delicado tejido sociopolítico mexicano. Una decisión provocada por la magnitud de la protesta organizada el martes por los maestros disidentes, apresuró un tercer encuentro en Bucareli. Fue rápido, sin mayores preámbulos ni protocolos, donde los maestros respondieron a la pregunta que les había hecho Osorio Chong la semana pasada: ¿qué es lo que pretenden? La respuesta, aunque en tono suave, busca lo que hasta ahora es impensable en el gobierno: marcha atrás en la reforma educativa. Ceder, como le dijo hace unos días Jesús Zambrano, presidente de la Cámara de Diputados, al secretario de Educación, Aurelio Nuño, sería un error. Si se cede ahora, afirmó, se cede todo.

CNTE y AMLO van por ésta, y la presidencia

Pablo Hiriart

Sería una derrota para México si en el nuevo diálogo del gobierno y la CNTE se pone a discusión la reforma educativa.
¿A santo de qué la CNTE, que es una minoría, va a imponer sus criterios sobre lo que debe ser la educación en el país?
Han conseguido ese objetivo únicamente porque son violentos y no les da miedo enfrentar a la policía.
Los que asaltan tiendas, roban camiones, autobuses y vehículos particulares, incendian edificios, rapan a otros maestros que dan clases y humillan a policías, van a delinear la política educativa de México.

Quienes tienen el peor desempeño académico de la república van a trazar el nuevo modelo educativo.

¿Qué nos pasa?

Los propagandistas de la CNTE lo dicen con fingida inocencia: “hay que escuchar a los maestros”.

Sí, pero “escucharlos”, en su lenguaje, implica hacer lo que ellos manden.

Ya se les escuchó por meses en la Secretaría de Gobernación. Se sabe lo que quieren –al menos lo que dicen que quieren–, y es derogar la reforma educativa.

Ahora insisten en la anulación de la reforma, y se les “escucha” porque tienen la particularidad de ser violentos.

Mediante el uso de la fuerza tienen bloqueadas carreteras en Oaxaca y Chiapas, vías férreas en Michoacán y estrangularon por segundo día la Ciudad de México.

Les dijeron que sí a discutir la educación en el país con las máximas autoridades en la materia, y aún así continuaron con su labor de ataque a la libertad de tránsito de la población, a la práctica del comercio y al transporte de personas y mercancías.

Es decir, ni dándoles esas concesiones bajan la pistola que tienen en el pecho del país.

Van por la caída de la reforma educativa para demostrar su fuerza e imponer su voluntad mediante métodos violentos.

Lo mismo van a hacer cuando, a través de movilizaciones y estrangulamiento del país, quieran imponer a su presidente de la República, luego de que otra vez se diga víctima del fraude electoral.
Resulta plausible que el gobierno no caiga en la provocación de causar una matanza, pero de eso se aprovechan para doblegarlo.

Ven contra las cuerdas al gobierno y por eso toman carreteras y ciudades.

Lo hacen engañados con el cuento de que la reforma es para “privatizar la educación” y quitarles sus plazas, como les ha mentido López Obrador.

Si un maestro no pasa la evaluación, se le capacita y la presenta de nuevo. Si tampoco la pasa, se le vuelve a capacitar y por tercera vez hace la prueba. Si en esa tampoco aprueba, no se le despide, sino que se le reubica en áreas administrativas porque no tiene vocación ni conocimientos para enseñar.

López Obrador y los líderes de la CNTE –que manejaban los ascensos y miles de millones de pesos– les han mentido diciéndoles que van a perder sus plazas y que todo es para “privatizar la educación”.

Sería trágico para generaciones de mexicanos que se echara atrás la reforma educativa, por la presión violenta de una minoría.

Resultaría imperdonable que esos vándalos que actúan engañados dicten la política educativa del país, luego de que tienen a sus entidades en los últimos lugares de desempeño académico.

Y sería la puesta en bandeja para que López Obrador tome la presidencia en 2018 sin la necesidad de ganar las elecciones.

CNTE y AMLO van por ésta, y la presidencia

Pablo Hiriart

Sería una derrota para México si en el nuevo diálogo del gobierno y la CNTE se pone a discusión la reforma educativa.
¿A santo de qué la CNTE, que es una minoría, va a imponer sus criterios sobre lo que debe ser la educación en el país?
Han conseguido ese objetivo únicamente porque son violentos y no les da miedo enfrentar a la policía.
Los que asaltan tiendas, roban camiones, autobuses y vehículos particulares, incendian edificios, rapan a otros maestros que dan clases y humillan a policías, van a delinear la política educativa de México.