Los operadores de futuros de tasas de interés en EE.UU. incluso comenzaron a sopesar una pequeña posibilidad de un recorte de tasas, y muchos creen ahora que hay pocas chances de subirlas hasta fines del próximo año.
La Fed intentó este viernes tranquilizar a los mercados asegurando que podría inyectar toda la liquidez necesaria a través de líneas de swap cambiarios con otros bancos centrales, incluyendo al Banco de Inglaterra.
San Francisco. La votación de Reino Unido en favor de abandonar la Unión Europea sumergió a los mercados financieros en una ola de volatilidad y puso en pausa las ambiciones de la Reserva Federal de subir las tasas de interés dos veces este año.
La Fed intentó este viernes tranquilizar a los mercados asegurando que podría inyectar toda la liquidez necesaria a través de líneas de swap cambiarios con otros bancos centrales, incluyendo al Banco de Inglaterra.
La libra esterlina bajó a mínimos de 1985 frente al dólar y las bolsas perdieron más de US$2 billones en valor de mercado cuando los inversores huyeron hacia activos de menor riesgo después de la votación.
Los operadores de futuros de tasas de interés en Estados Unidos incluso comenzaron a sopesar una pequeña posibilidad de un recorte de tasas, y muchos creen ahora que hay pocas chances de subirlas hasta fines del próximo año.
"Te puedes olvidar de un alza de tasas en el corto plazo", dijo Thomas Costerg, economista de Standard Chartered Bank. "Lo que me preocupa es que la votación del Brexit pueda convertirse en una piedra en el zapato que frene el panorama de crecimiento de Estados Unidos".
La presidenta de la Fed de Kansas, Esther George, sugirió en una entrevista publicada el viernes -pero realizada antes de que se conocieran los resultados del referendo de Reino Unido- que aún cree que las tasas de interés en Estados Unidos necesitan ser subidas pronto.
Sin embargo, comentarios de otros funcionarios de la Fed antes del referendo reflejaron precisamente su preocupación sobre impactos en los mercados financieros como los que se sintieron el viernes.
La presidenta de la Fed, Janet Yellen, había advertido que el "Brexit" podría afectar negativamente las condiciones financieras y el panorama de la economía estadounidense.
La salida de Reino Unido de la Unión Europea privará al bloque de su segunda economía más grande y de uno de los estados más liberales en términos económicos.
El asunto ahora para la Fed y para los bancos centrales del mundo es cuánto tiempo durará el shock y cuán lejos se propagará. Muchos inversores y economistas están preocupados de que la votación pueda deteriorar el alicaído crecimiento económico de Europa.
"Depende de cuánto empeoren las cosas y del tiempo que dure esto", dijo Roberto Perli, socio de Cornerstone Macro LLC. "El problema con intentar predecir resultados es que en este escenario hay demasiadas incógnitas inescrutables".
Pocos expertos esperan que la economía de Estados Unidos se deteriore seriamente a raíz de la votación.
Y si el crecimiento en el empleo de Estados Unidos, los salarios, la inflación y la producción continúan, la Fed necesitará subir las tasas de interés en algún momento, incluso cuando el impacto completo del Brexit no se conozca sino hasta dentro de algunos años.
La Fed intentó este viernes tranquilizar a los mercados asegurando que podría inyectar toda la liquidez necesaria a través de líneas de swap cambiarios con otros bancos centrales, incluyendo al Banco de Inglaterra.
La libra esterlina bajó a mínimos de 1985 frente al dólar y las bolsas perdieron más de US$2 billones en valor de mercado cuando los inversores huyeron hacia activos de menor riesgo después de la votación.
Los operadores de futuros de tasas de interés en Estados Unidos incluso comenzaron a sopesar una pequeña posibilidad de un recorte de tasas, y muchos creen ahora que hay pocas chances de subirlas hasta fines del próximo año.
"Te puedes olvidar de un alza de tasas en el corto plazo", dijo Thomas Costerg, economista de Standard Chartered Bank. "Lo que me preocupa es que la votación del Brexit pueda convertirse en una piedra en el zapato que frene el panorama de crecimiento de Estados Unidos".
La presidenta de la Fed, Janet Yellen, había advertido que el "Brexit" podría afectar negativamente las condiciones financieras y el panorama de la economía estadounidense.La volatilidad en los mercados el año pasado, la fortaleza del dólar en los últimos dos años, los bajos precios del petróleo y crecimiento ralentizado de los socios comerciales de Estados Unidos han mantenido a la Fed refrenada.
La presidenta de la Fed de Kansas, Esther George, sugirió en una entrevista publicada el viernes -pero realizada antes de que se conocieran los resultados del referendo de Reino Unido- que aún cree que las tasas de interés en Estados Unidos necesitan ser subidas pronto.
Sin embargo, comentarios de otros funcionarios de la Fed antes del referendo reflejaron precisamente su preocupación sobre impactos en los mercados financieros como los que se sintieron el viernes.
La presidenta de la Fed, Janet Yellen, había advertido que el "Brexit" podría afectar negativamente las condiciones financieras y el panorama de la economía estadounidense.
La salida de Reino Unido de la Unión Europea privará al bloque de su segunda economía más grande y de uno de los estados más liberales en términos económicos.
El asunto ahora para la Fed y para los bancos centrales del mundo es cuánto tiempo durará el shock y cuán lejos se propagará. Muchos inversores y economistas están preocupados de que la votación pueda deteriorar el alicaído crecimiento económico de Europa.
"Depende de cuánto empeoren las cosas y del tiempo que dure esto", dijo Roberto Perli, socio de Cornerstone Macro LLC. "El problema con intentar predecir resultados es que en este escenario hay demasiadas incógnitas inescrutables".
Pocos expertos esperan que la economía de Estados Unidos se deteriore seriamente a raíz de la votación.
Y si el crecimiento en el empleo de Estados Unidos, los salarios, la inflación y la producción continúan, la Fed necesitará subir las tasas de interés en algún momento, incluso cuando el impacto completo del Brexit no se conozca sino hasta dentro de algunos años.