“ABANDONO EL CAMPUS PENSANDO, ESTA ES LA MEJOR UNIVERSIDAD DEL MUNDO.”
RICARDO VALENZUELA
El sábado dos de Abril, después de un largo vuelo de más de tres horas originado en Dallas, a través de la ventana del avión se develaba con gran belleza la ciudad de Guatemala. Con una eficiencia impresionante desembarcábamos y, en menos de quince minutos, sorteábamos lo que en muchos países es un calvario: Inmigración y aduana. Al abandonar el aeropuerto me azota la agradable brisa de la ciudad y minutos después transitaba hacia mi hotel. Era una noche clara que me permitió atestiguar lo que tanto me afirmaran; Guatemala es una ciudad realmente bella y cosmopolita.
El sábado dos de Abril, después de un largo vuelo de más de tres horas originado en Dallas, a través de la ventana del avión se develaba con gran belleza la ciudad de Guatemala. Con una eficiencia impresionante desembarcábamos y, en menos de quince minutos, sorteábamos lo que en muchos países es un calvario: Inmigración y aduana. Al abandonar el aeropuerto me azota la agradable brisa de la ciudad y minutos después transitaba hacia mi hotel. Era una noche clara que me permitió atestiguar lo que tanto me afirmaran; Guatemala es una ciudad realmente bella y cosmopolita.