ESTADO ISLÁMICO A PUNTO DE CONSEGUIR QUE VIEJA PROFECÍA ISLÁMICA SOBRE EL APOCALIPSIS SE HAGA REALIDAD

Los amantes de las profecías apocalípticas de todo tipo, estarán de enhorabuena.
Según revela el periodista Iván Yakovina, los milicianos del Estado Islámico están viendo cumplidos sus deseos con la invasión turca del norte de Siria, pues habría sido predicha en una profecía hace mil quinientos años.

Según el periodista, los terroristas abandonan sus posiciones sin ofrecer ningún tipo de resistencia y advierte que la razón de ser y el propósito del Estado Islámico no es el bienestar de sus seguidores ni tampoco la conquista del mundo y la construcción de un califato mundial, sino “la aproximación del fin del mundo, con la posterior plaza en el paraíso para sus partidarios y la caída a los infiernos para sus opositores”.
Según las antiguas profecías de los textos sagrados islámicos, el fin del mundo será precedido por la “batalla final” entre las fuerzas del ‘califato’ y las de ‘Roma’.

Mientras que todos los islamistas de Estado Islámico se identifican sin problemas con ese presunto califato de las profecías, la interpretación sobre la identidad de esas presuntas “fuerzas de Roma”, es mucho más vago.
Inicialmente, la mayoría de islamistas interpretaron a las “fuerzas de Roma”, como el occidente cristiano. Sin embargo, muchos otros lo interpretaron como la actual Turquía, sucesora de Bizancio (el Imperio romano de Oriente y último vestigio real del Imperio Romano).

Cabe destacar que cuando se escribieron estas profecías, ya no existía el Imperio Romano occidental, sino solo Bizancio, por lo que en dichas escrituras apocalípticas se identificaría de forma inequívoca a la actual Turquía, pues coincidiría geográficamente con el emplazamiento de esa “Roma” en la que se escribieron dichas profecías.
Dado que las tropas turcas ya han comenzado la invasión y están a unos centenares de kilómetros de Dabiq, la cantidad de los partidarios de la versión ‘turca’ “ha aumentado significativamente”, apunta el periodista.

Una profecía islámica de hace 1.300 años anunció una gran batalla en el norte de Siria entre un ejército musulmán y una “horda de infieles” con 80 banderas. La descomunal confrontación, que llega a ser calificada de ‘malahim’ (‘Armagedon’ en árabe) tendría lugar en la localidad Siria de Dabiq y, aunque el ejército musulmán sufriría numerosas bajas, acabaría venciendo y su poder continuaría hasta el fin de los días. Según un ‘hadiz’ (hechos y dichos atribuídos al profeta) relatado por Abú Hurayra, uno de sus compañeros, fue el propio Mahoma el que realizó la profecía.

Esta profecía, que tiene varias versiones, está siendo utilizada por el aparato de propaganda del Estado Islámico como herramiento de reclutamiento y para elevar las tropas de sus miembros. Así, el Estado Islámico es ese ejército musulmán de la leyenda, mientras que las horas de infieles con 80 banderas sería la coalición internacional que, liderada por EEUU, se ha puesto en pie para destruirles.

Según encontramos en la web Red Safe World:

Dabiq sería, por lo tanto, el enclave de la guerra del juicio final entre las tropas islámicas que representarían al Bien y las huestes de la oscuridad que para el imaginario yihadista son las occidentales y todos aquellos Países que les combaten junto a los apóstatas traidores.
Esta creencia procede de un hadiz que se encuentra en el libro de Sahih Muslim “Agitación y Presagios de la Última Hora” (Kitab Al-Fitan wa Ashrat As-Sa`ah) y que habla de una batalla futura, en la localidad de Dabiq (Siria), que sería conquistada por las huestes romanas que se enfrentarán a las árabes de la que saldrán victoriosas las segundas no sin antes ver como una tercera parte de las mismas huyen, otra tercera parte mueren, siendo considerados mártires y la tercera parte restante es la que entra, triunfante, en Constantinopla (la actual Estambul).

Después, regresarían a Siria, liderados por Jesús, al que los musulmanes también veneran y del que esperan su Segunda Venida en el final de los tiempos, combatiendo en Siria contra el mismísimo Satanás al que destruirá con su lanza junto al resto de enemigos de Dios.

El lugar de la batalla es definido con bastante precisión en las profecías: la ciudad de Dabiq en el norte de Siria, situada justo entre los dos enclaves kurdos hacia los que se dirige la incursión turca.
Según Yakovina, ahora los terroristas “están realmente seguros de que falta una semana o incluso unos pocos días hasta el inicio de la última batalla”.
La escena de la batalla está lista (han estado fortaleciendo Dabiq durante un año y medio) y una de las partes (los propios islamistas) ya están en su lugar, mientras la segunda está a punto de llegar.

Por ello, según el analista, “El sueño del apocalipsis, que ha nutrido la existencia del Estado Islámico desde su creación, está a punto de hacerse realidad”.
El periodista recuerda que el inicio de la mítica batalla por Dabiq “se vería como un milagro por muchos musulmanes de todo el mundo”, y no solo confirmaría “el carácter sagrado del Estado Islámico, sino que también evidenciaría la llegada inminente e inevitable del fin del mundo”.
Para el analista, “resulta difícil de imaginar lo que puede comenzar en el mundo si decenas o incluso cientos de millones de personas están totalmente seguros de que la historia humana está a punto de terminar”.

Las afirmaciones de Yakovina no van desencaminadas, si tenemos en cuenta que la revista de propaganda de Estado Islámico, se llama, precisamente, Dabiq, el nombre de la ciudad en la que se produciria esta batalla final previa al apocalipsis.
De hecho, tal y como afirmaban algunos medios ya hace 2 años, el término ‘Dabiq’ está proliferando en los foros yihadistas como palabra clave para la yihad contra occidente.

COMENTARIO: Aunque no creemos ni la mitad de las cosas que nos dicen sobre Estado Islámico y su presunta búsqueda del Apocalipsis, argumentos que nos parecen una tontería para reclutar a idiotas y para encubrir ante la opinión pública la auténtica función de este grupo terrorista que ha resultado tan conveniente a Occidente e Israel, publicamos este artículo porque es bastante evidente que el tema no tardará demasiado en ser puesto sobre la mesa y en convertirse en un argumento en los mass media.
Sea como sea, parece que todos los amantes de las profecías apocalípticas procedentes de sagradas escrituras, tanto los cristianos como los musulmanes, tienen en la guerra de Siria un fértil campo de desarrollo para sus creencias de destrucción del mundo y ahora estamos a punto de vivir un nuevo capítulo de ello…