Wikipedia

Search results

Showing posts with label NARCOS. Show all posts
Showing posts with label NARCOS. Show all posts

Friday, October 21, 2016

Sicario del cártel de Juárez: lo único que ha cambiado es que narcos “ahora somos más discretos”

By: Elena Toledo -

Ciudad Juárez
El Cártel de Juárez y el Cártel de Sinaloa se pelean el narcotráfico en la ciudad mexicana. (El Ágora)
Un hombre que se identifica bajo el seudónimo de Jorge, quien es el jefe de La Línea, brazo armado del Cártel de Juárez, fue entrevistado por el diario mexicano El Universal y ahí reveló que “la paz en Ciudad Juárez está por terminar” y resalta el hecho expresando a su entrevistador: “agárrate que ahí viene lo bueno”.
Jorge está involucrado en ese fin de los tiempos de paz de la ciudad fronteriza de México, paz que fue destacada por el diario estadounidense The New York Times en 2013 con una publicación que tenía por título: “Ciudad Juárez, una frontera conocida por sus homicidios, regresa a la vida“. En dicha publicación se describía cómo esta ciudad había pasado de ser la más violenta de América, a poder tener de regreso la vida nocturna, y un notable descenso en el número de asesinatos con lo que parecía cerrada esa era de violencia desenfrenada.



Entre finales de 2008 y finales de 2012 los cárteles de Juárez y el de Sinaloa se enfrentaban a tiros en las calles de esta ciudad, en los bares, restaurantes, iglesias, funerales, sin embargo el fin de esta guerra fue una tregua entre ambas bandas delictivas y la muerte de uno de sus miembros, según explica Gustavo de la Rosa Hickerson, visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Ciudad Juárez en esa época.
Juan explica que esta tregua en realidad consistió en seguir trabajando, pero de forma discreta, no asesinando en lugares públicos.
“Es mentira que Juárez ya cambió” dice Jorge quien amplía: “no ha cambiado absolutamente nada, nomás la orden es que seamos más discretos, que no tiremos a la gente en la calle, por eso hay un chingo de cementerios clandestinos. Ahora hay que quemarlos, enterrarlos o echarlos a las alcantarillas” detalló.
Luego de tres años del artículo del New York Times, en Ciudad Juárez se vuelve a sentir un ambiente tenso, ya que desde el pasado mes de julio los homicidios han aumentado de 1 al día a 1,6 según datos oficiales que detallan que el mes de julio cerró con 13 homicidios reportados reflejando un aumento en septiembre cuando fueron 20 los registrados.


“Juárez es lo máximo para la heroína”

Jorge señaló que le pagan bonos por asesinar vendedores de cristal, que es la metanfetamina cristalizada, y el monto depende de el rango que el vendedor tenga ya que si es un jefe puede recibir hasta US$150.00 mientras que si es un vendedor de la calle, la cifra es menor.
“Ahorita, Juárez es lo máximo para la heroína, le sacas 100 % de lo que inviertes porque piden tanto aquí como en El Paso, Texas, piden y piden y no nos damos abasto aunque trabajemos 24 horas” relata el también sicario.
El entrevistado es un jefe de células, lo que significa que tiene un rango medio dentro de La Línea y a su vez es la conexión entre el Cártel de Juárez y Barrio Azteca, una pandilla que nació en Texas y hace el “trabajo sucio” del cártel.
Dentro de las asignaciones que Jorge tiene está el reclutar personas para cruzar droga a Estados Unidos, surtir los puntos de venta de heroína así como la compra de automóviles para cargarlos de droga.
“La guerra está porque la gente de Sinaloa quiere meter el cristal y no nos vamos a dejar, hay órdenes de hacer lo que sea para no permitir nada de eso. ¿Cómo va a llegar a la casa de uno a querer hacer cosas que no?” cuestiona Jorge.
Respecto a los consumidores del cristal señala que quienes consumen cristal, su período de vida es de tres años y luego mueren “nos están matando a la gente, y ese dinero se nos va a nosotros, porque eso que se gastan en el cristal lo pueden usar en la heroína” dice.
El sicario reveló a El Universal que ya tienen refuerzo de armas en Ciudad Juárez, por lo que se comenzarán a ver nuevamente autos con impactos de bala, sangre en las calles y el terror que parecía haberse ido, regresará.
“Tenemos que acabar con ellos desde la raíz” dice Jorge refiriéndose al Cártel de Sinaloa, “hay que matarlos y hacerles saber, mandarles mensajes. Te lo digo, ahorita en estos meses viene lo mero bueno, porque no pensamos dejar ninguna tienda de ellos” aseguró.
Fuente: El Universal

Sicario del cártel de Juárez: lo único que ha cambiado es que narcos “ahora somos más discretos”

By: Elena Toledo -

Ciudad Juárez
El Cártel de Juárez y el Cártel de Sinaloa se pelean el narcotráfico en la ciudad mexicana. (El Ágora)
Un hombre que se identifica bajo el seudónimo de Jorge, quien es el jefe de La Línea, brazo armado del Cártel de Juárez, fue entrevistado por el diario mexicano El Universal y ahí reveló que “la paz en Ciudad Juárez está por terminar” y resalta el hecho expresando a su entrevistador: “agárrate que ahí viene lo bueno”.
Jorge está involucrado en ese fin de los tiempos de paz de la ciudad fronteriza de México, paz que fue destacada por el diario estadounidense The New York Times en 2013 con una publicación que tenía por título: “Ciudad Juárez, una frontera conocida por sus homicidios, regresa a la vida“. En dicha publicación se describía cómo esta ciudad había pasado de ser la más violenta de América, a poder tener de regreso la vida nocturna, y un notable descenso en el número de asesinatos con lo que parecía cerrada esa era de violencia desenfrenada.


Tuesday, October 4, 2016

El enojo del general

Para cualquier secretario de la Defensa, la utilización de calificativos lanzados en lenguas de fuego como “enfermos, insanos, bestias y criminales”, como llamó el general Salvador Cienfuegos a quienes emboscaron a una patrulla en Culiacán este viernes con un saldo de cinco soldados muertos, es inusual. Pero que utilice una retórica tan violenta, tan indignada, tan fuera de proporción al venir de quien viene, el general secretario, lleva a preguntar por qué está tan enojado el jefe de las Fuerzas Armadas. En un año y medio, su estado de ánimo se ha modificado y su lenguaje ha cambiado notoriamente.

El comparativo natural es con el 2 de mayo de 2015, un día después de que criminales derribaran un helicóptero en Jalisco donde murieron ocho militares y una policía federal, cuando el general Cienfuegos habló en un homenaje con lenguaje enérgico pero no desproporcionado. Ese día expresó “nuestro reconocimiento perenne a ellos y nuestro apoyo incondicional para sus padres, esposas e hijos, así como nuestro compromiso absoluto para continuar trabajando sin descanso en la salvaguarda de los buenos mexicanos, siempre respetando la ley y a las personas, y en coordinación estrecha con los entes de gobierno”.

En el homenaje a los soldados emboscados en Sinaloa, el secretario dijo el sábado: “Este artero y cobarde ataque no es sólo una afrenta al Ejército o a las Fuerzas Armadas; es también una afrenta a la naturaleza humana, a la convivencia colectiva, a los principios sociales, a las leyes que nos hemos dado y al Estado de derecho. Nuestros soldados fueron emboscados por otro grupo… de enfermos, insanos, bestias criminales con armas de alto calibre... Seres sin conciencia... sepan que vamos con todo, con la ley en la mano y la fuerza que sea necesaria. Nadie por encima de la ley. Que la fuerza que apliquen tendrá la respuesta que corresponda por parte de la autoridad”.

El fraseo y el tono de los discursos son totalmente diferentes, como si hubieran sido construidos por distintas personas. ¿Qué ha pasado en un año? Muchas cosas. En el campo de la política, el presidente dejó al Ejército desamparado. Por ejemplo, no corrigió al exprocurador Jesús Murillo Karam cuando calificó el enfrentamiento con criminales e inocentes en Tlatlaya en 2014 como “matanza”, y permitió que el entonces subsecretario de Gobernación, Luis Enrique Miranda, ofreciera a los padres y abogados de los normalistas de Ayotzinapa hablar con miembros del Batallón 27 de Infantería y revisar su cuartel en Iguala. Estas dos decisiones, que afectaron el respeto del general al interior del Ejército y con los generales retirados, fueron agotando la paciencia del secretario con el poder civil.

El presidente Peña Nieto pide siempre apoyo para las Fuerzas Armadas, pero donde podía haber probado sus dichos con hechos, no lo hizo. En el Presupuesto de 2017, dejó que la Secretaría de Hacienda las golpeara. Le quitó 45.7 por ciento para adquisición de radares, aviones, helicópteros e instalaciones militares –a la Secretaría de la Marina la dotó con recursos para un Centro de Entrenamiento y un nuevo Sistema de Inteligencia–, y no autorizó compra de nuevo armamento para las Fuerzas Especiales, que tiene 10 años de antigüedad, pese a que en ese campo los criminales cada vez están mejor equipados. Por otra parte, de los 91 proyectos y programas de inversión de las Fuerzas Armadas, sólo le otorgó presupuesto para 14, dentro de los cuales se encuentra el pago del nuevo avión presidencial, que se lleva 70 por ciento de ese recurso.

El maltrato político y presupuestal no reconoce el costo que han tenido que pagar los militares en la guerra contra el narcotráfico. Informes internos de la Secretaría de la Defensa revelan que hasta el primero de agosto de 2016 el total de militares caídos durante los últimos nueve años de combatir al narcotráfico ascendía a 468, de los cuales Tamaulipas, con 113 efectivos caídos, era la entidad donde más violencia habían enfrentado, seguida de Michoacán con 53 y Sinaloa, donde se dio la emboscada del viernes, con 50. De ese total, 43 por ciento cayeron en ataques con armas de fuego y 7.3 por ciento fueron 'ejecutados' por el crimen organizado. La mayor parte de los caídos, el 60 por ciento, eran soldados; el 20 por ciento eran cabos y el 12 por ciento sargentos. Es decir, la tropa que trabaja en las carreteras y montañas del país. El desgaste es mucho. De 2007 a agosto de este año el total de ataques que han sufrido es de tres mil 813.

Si el discurso del general Cienfuegos cambió tan radicalmente en lo retórico en un año, también la reacción táctica. Tras la emboscada del viernes, ordenó un despliegue militar a Sinaloa de envergadura. La noche del mismo viernes llegaron a Culiacán un centenar de miembros del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales, los llamados GAFES, que son los comandos de élite del Ejército, para combatir a los responsables del ataque. La reacción del secretario de la Defensa no tiene precedente en lo que va de la administración, y es contraria a la forma como Peña Nieto y su gobierno han reaccionado ante los desafíos criminales, llena de tonos duros pero abundantes en acciones laxas.

El general Cienfuegos se apartó de la racional en Los Pinos, que lo dejó solo, según sugieren sus acciones. Lo que le queda es recuperar el respaldo interno de sus oficiales y de los generales retirados que tanto le criticaron su tibieza ante el poder civil.

El enojo del general

Para cualquier secretario de la Defensa, la utilización de calificativos lanzados en lenguas de fuego como “enfermos, insanos, bestias y criminales”, como llamó el general Salvador Cienfuegos a quienes emboscaron a una patrulla en Culiacán este viernes con un saldo de cinco soldados muertos, es inusual. Pero que utilice una retórica tan violenta, tan indignada, tan fuera de proporción al venir de quien viene, el general secretario, lleva a preguntar por qué está tan enojado el jefe de las Fuerzas Armadas. En un año y medio, su estado de ánimo se ha modificado y su lenguaje ha cambiado notoriamente.

Sunday, August 21, 2016

Lo que hay detrás del secuestro del hijo del Chapo Guzmán

Jesús Alfredo "El Chapito" Guzmán es el encargado del transporte de la cocaína que produce el Cártel de Sinaloa hacia Estados Unidos

Chapo Guzmán
Jesús Alfredo Guzmán es encargado de llevar hacia los EE.UU. la droga que el cartel que lideraba su padre, el Chapo Guzmán, produce en México. (La Prensa)
El “valiente” movimiento de un cártel mexicano de la droga en ascenso al secuestrar a Jesús Alfredo Guzmán hijo del encarcelado Joaquín “el Chapo” Guzmán enciende las alarmas ante una posible ola de violencia por el desafío directo al cártel de Sinaloa.
El secuestro parece ser el último golpe para socavar la autoridad del encarcelado capo de la droga y ocurre poco después de que hombres armados invadieron la vivienda de su madre en el estado de Sinaloa, en el norte del país.



El fiscal del estado occidental de Jalisco, Eduardo Almaguer, confirmó el martes en la noche que Jesús Alfredo Guzmán Salazar, de 29 años, estaba entre la media docena de hombres secuestrados esta semana en un restaurante del balneario de Puerto Vallarta, en la costa mexicana del Pacífico. Los secuestradores pertenecen al cártel rival Jalisco Nueva Generación (CJNG), agregó.
El poder y alcance de la organización de Jalisco, conocida como CJNG, creció con rapidez en los últimos años, a menudo en competencia directa con el grupo de Guzmán, que es considerada desde hace mucho la pandilla de narcos más poderosa de México.
“Esto podría indicar una escalada”, dijo Samuel Logan, socio gerente de la consultora de seguridad Southern Pulse, acerca del secuestro. “Este es un movimiento muy valiente” .
Según el fiscal Almaguer, siete hombres armados irrumpieron en una celebración a la que asistían 16 personas en el exclusivo restaurante La Leche, en la zona hotelera de Puerto Vallarta, alrededor de la 1:00 a. m. del lunes.
Separaron a las nueve mujeres a un lado y tomaron a los siete hombres, uno de los cuales al parecer escapó, agregó. Autoridades dijeron que no se tiene conocimiento de que se haya solicitado un rescate.
El cártel de Jalisco se labró una reputación por sus ataques frontales contra las autoridades del estado, pero también se ha establecido en zonas lejanas como Veracruz o Baja California Sur.
“No me sorprende que hayan presionado para llevar la escalda al próximo nivel”, dijo Logan.
“Y si algo de lo que creo pasa en los próximos 10 días esto se va a confirmar. Estos chicos no van a esperar para devolverla”.
Este sería el último indicio de que el dominio del cártel de Sinaloa no es el que era en el pasado.
Se dice que el Chapo administraba sus actividades desde la cárcel hasta que se escapó por segunda vez en el 2015, y cuando fue recapturado se le impusieron medidas de seguridad más estrictas en el penal de Ciudad Juárez, en la frontera con Estados Unidos, en el que está internado.En los últimos meses se reportaron otras afrentas contra el capo del narcotráfico.
Chapo Guzmán
Momento en el que Alfredo Guzmán, hijo del Chapo Guzmán, era secuestrado de un restaurante en Puerto Vallarta. (Infobae)
En junio, la prensa informó que un escuadrón armado entró a la casa de la madre de Guzmán y sustrajo vehículos y otras propiedades.
“En este momento hay una guerra por el control del cártel de Sinaloa, y en esa guerra, se está centrando el tema en ataques a sus familiares”, dijo Raúl Benítez, especialista en seguridad y profesor de ciencias políticas de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Jesús Alfredo Guzmán, junto a su padre y a otros líderes de su organización, lleva años en el radar de las autoridades. En 2009, Estados Unidos lo acusó de tráfico de drogas en Chicago.
En 2012, en virtud de la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico, el Departamento del Tesoro estadounidense lo describió como lugarteniente de su padre. Ese mismo año, marines mexicanos arrestaron por error a un vendedor de autos de segunda mano y lo presentaron a la prensa como Jesús Alfredo.
Almaguer apuntó que las autoridades siguen trabajando para confirmar las identidades de dos de los seis hombres secuestrados.
Los rumores apuntan a que el hermano mayor de Jesús Alfredo, Iván Archivaldo Guzmán, está también entre las víctimas.
Andrés Granados, un abogado que representa a su padre, dijo no tener información sobre los secuestros.Si Iván Archivaldo está en la lista de secuestrados, los responsables tendrían al menos a dos de los herederos del Chapo, que se cree están haciéndose con el control de partes de su imperio.
Fuentes: Milenio, El Blog del Narco, El Heraldo

Lo que hay detrás del secuestro del hijo del Chapo Guzmán

Jesús Alfredo "El Chapito" Guzmán es el encargado del transporte de la cocaína que produce el Cártel de Sinaloa hacia Estados Unidos

Chapo Guzmán
Jesús Alfredo Guzmán es encargado de llevar hacia los EE.UU. la droga que el cartel que lideraba su padre, el Chapo Guzmán, produce en México. (La Prensa)
El “valiente” movimiento de un cártel mexicano de la droga en ascenso al secuestrar a Jesús Alfredo Guzmán hijo del encarcelado Joaquín “el Chapo” Guzmán enciende las alarmas ante una posible ola de violencia por el desafío directo al cártel de Sinaloa.
El secuestro parece ser el último golpe para socavar la autoridad del encarcelado capo de la droga y ocurre poco después de que hombres armados invadieron la vivienda de su madre en el estado de Sinaloa, en el norte del país.