El principal banco de desarrollo
internacional de China busca abrir una nueva Ruta de la Seda con tres
proyectos iniciales enfocados en las arterias de transporte de Asia
Central y Pakistán.
El BAII fue formalmente lanzado en enero de 2016 tras atraer a varios países de Asia y de la UE, muchos de los cuales son aliados de EE.UU. que ignoraron la preocupación de Washington sobre la aparición de un rival chino contra el Banco Mundial y el Banco Asiático de Desarrollo (BAsD).
La semana pasada el presidente del BAII, Jin Liqun, y su homólogo del BM firmaron un acuerdo marco para cooperar en los proyectos cofinanciados. En Pakistán, el AIIB junto con el BAsD y el Departamento del Desarrollo Internacional del Reino Unido financiarán la construcción de una autopista que conectará Shorkot y Khanewal. Asimismo, en Tayikistán, el BAII junto con el BAsD financiarán la construcción de una carretera desde Dusambé hasta Tursunzoda en la frontera con Uzbekistán. El tercer vínculo de transporte será la circunvalación de Bakad, en la capital kazaja Almatý. Los tres proyectos recibirán una aprobación preliminar por parte del comité de inversiones del BAII para finales de abril.
Al enfocar inicialmente los proyectos dirigidos por otros bancos internacionales de desarrollo, el BAII puede "erigir un portafolio de inversiones mucho más rápido de lo que sería posible si actuara solo", se informó. Asimismo, tanto el BM como el BAsD y otros bancos internacionales, pueden aprovechar hasta 100.000 millones de dólares mientras "ahorran su propio dinero para proyectos adicionales".
No comments:
Post a Comment